Seguimos las recomendaciones de la Sociedad Española de Anatomía Patológica.

Los excedentes tisulares se deben guardar al menos 30 días.

Los bloques de parafina, preparaciones histológicas y preparaciones citológicas al menos 10 años. Deben estar correctamente archivados y etiquetados para su posible recuperación.

Hay que tener en cuenta que en estas muestras se conserva información genética muy importante para posibles tratamientos futuros.